Probióticos

En esencia, los probióticos son una colección de microorganismos (generalmente bacterias o levaduras) que se pueden integrar en diferentes tipos de productos, como productos cosméticos, y aunque eso no suena muy atractivo, juegan un papel increíblemente importante en la capacidad de la piel de protegerse y defenderse. En nuestros productos cosméticos utilizamos fracciones de probióticos, es decir, los microorganismos son lisados/rotos durante su proceso de obtención.

Todos nosotros, como humanos, tenemos nuestra propia combinación única y cambiante de esos microorganismos, que se conoce como microbioma, algo de lo que probablemente también hayas oído hablar. Es único para cada individuo, pero encontramos los principales grupos de microorganismos en todos los individuos y es estable a lo largo del tiempo (año tras año) en la mayoría de los sitios del cuerpo. Existen 2 microbiomas: el permanente que será estable en el tiempo y el transitorio que puede ser modificado por el entorno. El microbioma tiene varias funciones: regular, proteger y reparar/recuperar la piel. Es importante mantener el microbioma bien equilibrado para mantener una barrera cutánea óptima, una piel que se defienda mejor de los agresores y que se autorrecupere más rápido para luego preservar la piel de cualquier problema.

Ahora que hemos aclarado qué son los probióticos, es hora de comprender qué hacen los probióticos y cuáles son sus beneficios. En resumen, el microbioma es extremadamente delicado y se desequilibra fácilmente. Todo, desde la luz ultravioleta hasta la contaminación e incluso los productos para el cuidado de la piel que usa, especialmente los productos de higiene, pueden afectar el microbioma de su piel y causar problemas como sensibilidad, sequedad y, en casos extremos, acné. Y aquí es donde entra en juego el cuidado de la piel con probióticos: cuando se aplica tópicamente, ayuda a restaurar el equilibrio de la piel y asegura que la barrera cutánea se mantenga lo más fuerte posible.

No se puede negar que los términos probióticos y prebióticos suenan confusos, especialmente cuando son términos que se relacionan entre sí. Pero en pocas palabras, los prebióticos se consideran el "alimento" que fomenta el crecimiento de bacterias buenas, los probióticos son las bacterias (o microorganismos) en sí mismas.